25 octubre, 2007
Volver
Volvió Soda, y nosotros estuvimos ahí. El domingo a la noche Cerati, Alberti y Bosio, demostraron que son la banda mas grande del rock argentino de las últimas décadas. Tardamos diez horas en llegar a Buenos Aires, nos dieron dos horas para comer, estuvimos cuatro horas y media esperando en el gallinero (estadio Monumental) bajo el hermoso sol capitalino, nos comimos unos helados de agua de limón por la módica suma de 4 pesos la unidad, un vasito de coca por cinco pesitos; y todo para asistir a un show de casi tres horas espectaculares. Mi hermana Paloma (foto abajo), que era la homenajeada (le regalamos el viaje con mi hermano para su cumpleaños de 15) lo definió como "un sueño". No podías dejar de sorprendente con lo que estabas viendo, el sonido era impresionante, cada canción tenía su propia escenografía con tres ruedas de luces que bajaban, subían, giraban, etc. y seis pantallas que detrás de los músicos se movían y mostraban imágenes, frases (como en la foto durante Primavera 0). Cerati estaba muy inspirado con la guitarra y dejó con una sonrisa, mezcla de alegría y de asombro a las 60 mil personas que llenaron el estadio. Lo más importante: Paloma se fue feliz, y nostros también.
(Dejame vivir este sueño
el mejor que he tenido)
Una flor,
una flor,
otra flor.
Un maestro,
una causa,
un efecto.
¿Quién sabrá el valor de tus deseos?
¿Quién sabrá?
Gira el sol,
gira el mundo,
gira Dios.
Energía misteriosa.
Resplandor.
Al soltar mi cuerpo en remolinos,
resplandor
(Otra flor...)
Paraiso,
zona pura,
perfección.
Florecer
mirándote a los ojos.
Perfección.
Florecer los dos.
Florecer.
Florecer los dos.
Florecer.
18 octubre, 2007
El robo de Fierro
Si no nos creen, a las pruebas nos remitimos:
Como se puede ver, en la historieta 2 (fragmento) después de muerto el cineasta Bergman es enviado a la tierra por dios en forma de pato. Y en la historieta 1, la original, con reminiscencia borgeana, un detective muere y Dios lo mada a descubrir sus propio asesinato pero en el cuerpo de un pato. Que robo!
Mirá que todavía no le compramos los derechas de autor, que sino...
EL VUELO DE SHEI * última entrega
La escultura de Shei
Fábula de Lui Dsi
El artesano Kung Shu cinceló una Shei, una vez terminada, la lechuza lucía un soberbio penacho de color esmeralda, que se erguía vaporoso por encima de su cabeza. Sus patas vermellón tenían reflejos deslumbrantes, sus plumas tornasoladas parecían estar hechas del brocado que tejen las nubes cuando se pone el sol, y su pecho era del color del fuego.
Todos aquellos que criticaron a Kung Shu no estaban vivos para ver la obra prodigiosa y el talento del artesano.
/ por matías matarazzo
EL VUELO DE SHEI * 9
La batalla final
Un fuerte temblor, anunció la llegada de Shei que sobrevolaba la larga fila de tortugas, una pared andante, con paso militar. El rey de Yan reunió a su ejército de dragones de dientes de marfil, sin saber muy bien qué estaba sucediendo.
- Mi querido príncipe, vuelvo a mi reino contra tu voluntad, a ocupar tu lugar, vencedor de vencedores.
- Ya se terminaron mis días de príncipe, estás ante Jantan el nuevo rey del imperio. Si aceptas tu destino de muerte, le daré asilo a tus torpes reptiles.
- Sólo el verdadero rey demostrará ser inmortal.
Shei abrió su pico al cielo, detuvo el tiempo. Cuando los dragones se recuperaron y abrieron los ojos, las tortugas ya formaban un círculo a su alrededor. Los Zeis mostraron sus dientes amarillos. Las tortugas lentamente escondieron sus cabezas, escamosas, arrugadas. En un mismo instante las cuatro de las Keps desaparecieron, la tierra se movió con el golpe y un haz de luz verde enceguecedor bajó del cielo a cada uno de los caparazones. Comenzaron a avanzar, a cerrar el círculo, a escalonarse tomando velocidad hacía el montón de dragones, que escupían un fuego inútil, retrocedían, chocaban entre sí, intentaban volar, perecían.
Las sierpes con patas Gadis se comieron al indefenso Jantan de dos bocados. Y así Shei encontró un mundo para su imperio.
EL VUELO DE SHEI * 8
El ciego y el cojo
La lechuza Shei, el hombre sin rostro, las sierpes con patas Gadis y las tortugas Keps completaron el ejército. Antes de partir hacia el reino de Jantan, la lechuza parada en la rama más baja de un árbol les contó una fábula oriental:
Cierto reino fue invadido por el enemigo. Cuando un cojo se lo comunicó a un ciego, éste se cargó al cojo a sus espaldas y escaparon juntos. Lo hicieron aprovechando lo mejor de cada uno.
Juai Nan Dsi
16 octubre, 2007
EL VUELO DE SHEI * 7
El Pozo
Expect poison from the standing water
Una familia nómade que peregrinaba entre los diferentes reinos, tenía por costumbre en los asentamientos que construía, cavar pozos para sacar agua. Antes de partir debían taparlos porque habían escuchado que en el centro de la tierra vagaban las almas de los muertos.
En una ocasión, olvidaron cubrir el pozo, y las almas no salieron a la superficie. Sólo se pudrió el agua. Y de ese insipiente veneno se alimentaron dos sierpes con patas Gadis hasta hacerse del tamaño de dos hombres.
EL VUELO DE SHEI * 6
El Fuego
Se hizo la noche, para recorrer el camino cada viajante encendía una antorcha como guía. Por las noches ellos eran el camino. Shei podía ver en la oscuridad, sobrevolaba a los peregrinos como un ánima nocturna. Hasta que un hombre que debajo de su túnica parecía llevar por rostro una sombra, la detuvo en vuelo y le dijo:
- Ave de oscuro resplandor déjame guiar tu vuelo, el príncipe Jantan quiso atraparme con sus Dragones Zeis. Construyamos el camino de los desterrados, que nos conduzca a la inmortalidad.
La lechuza se paró en su hombro y con un graznido muy agudo apagó el fuego de todas las antorchas. Era la reina, de un reino sin mundo. Siguieron adelante hacia la isla Chili Yi.
11 octubre, 2007
EL VUELO DE SHEI * 5
El arte de matar dragones
En la isla Chili Yi, el príncipe Chu Ping-man encontró a orillas del mar dos tortuguitas Keps, las entrenó y las reprodujo durante tres años para poder matar Dragones.
EL VUELO DE SHEI * 4
La lechuza se muda de casa
Shei salió en busca de Yoli Yang la paloma. No estaba acostumbrada al vuelo constante, el aire hacía crecer en sus ojos un poder desconocido.
Entre las altas copas de los centenarios Kápok del bosque Sor, las aves se encuentran, se detienen, giran manteniendo las distancias. La paz se debate en el cruce de miradas. La paloma Yoli Yang es una voraz luchadora, tiene los ojos chiquitos, rojos.
Cierran los ojos y comienza el combate. Shei levantó su pico en un graznido al cielo, un resplandor violeta la rodeó, ondas concéntricas se desprendieron de su cuerpo. La paloma cruzó sus alas improvisando un escudo, tenía que resistir ese ataque, la lechuza no tenía forma de defenderse ante su velocidad. El graznido se agudizó y Yoli Yang retrocedió hasta que se quebraron sus defensas.
Quedó en medio de la tormenta violeta, las alas abiertas desplumadas, el tiempo suspendido. Sabe que no va poder levantarse.
05 octubre, 2007
Efeméride
Un día como hoy, pero de 1984 faltaba poco más de dos años para ser campeones mundiales de fútbol, y ya habían pasado dos de la guerra de malvinas, PC aún no significaba Computadora Personal, sino Partido Comunista, Borges todavía soñaba con el Nobel, Roky Balboa comenzaba a derribar el muro de Berlín, la gente escribía cartas, los carteros no rapartían sólo impuestos y cartas documento, los chicos estaban un par de años atrasados, teníamos plata que valía poco y tenía muchos ceros, sólo los riojanos conocían a Menem, las mujeres se peinaban feo, faltaba un año y 24 días para que naciera mi amada, y yo estaba saliendo sin mucho esfuerzo de la panza de mi mamá, el lugar donde estuve la mayor cantidad de tiempo ininterrumpido en mi vida, para hacer el clásico llantito y conocer a mi nueva familia.
02 octubre, 2007
EL VUELO DE SHEI * 3
Una receta para la inmortalidad
Un día estaba el príncipe Jantan dibujando los mapas de su reino, cuando uno de sus súbditos entró intempestivamente; había un forastero rondando el reino que tenía el poder de hacer inmortal a cualquier criatura. Inmediatamente, mandó a dos de sus Zeis, pequeños Dragones con dientes de marfil, a buscarlo. Pero el hombre, que era la oscuridad misma, se extravió en los caminos.
El príncipe mató a los Zeis, al súbdito, y siguió dibujando con los dientes apretados.
EL VUELO DE SHEI * 2
Por qué Dseng Shen mató al cerdo
Por orden de Dseng Shen los cerdos debían morir frente al pueblo.