El Pozo
Expect poison from the standing water
Una familia nómade que peregrinaba entre los diferentes reinos, tenía por costumbre en los asentamientos que construía, cavar pozos para sacar agua. Antes de partir debían taparlos porque habían escuchado que en el centro de la tierra vagaban las almas de los muertos.
En una ocasión, olvidaron cubrir el pozo, y las almas no salieron a la superficie. Sólo se pudrió el agua. Y de ese insipiente veneno se alimentaron dos sierpes con patas Gadis hasta hacerse del tamaño de dos hombres.
No hay comentarios:
Publicar un comentario